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Movilion

Los nuevos emisores de dinero móvil en América Latina

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Ilustración Rodolfo Fucile

El desarrollo del ecosistema alrededor del dinero móvil depende -en distinta medida según el país- de regulaciones que permiten o no el ingreso de nuevos players y modelos de negocios.

En este punto suelen chocar dos cosmovisiones.

Los que consideran que los modelos abiertos ponen en peligro la estabilidad del sistema financiero; y los que creen que el ingreso de nuevos jugadores (típicamente, entidades no bancarias) dará acceso a servicios financieros a más gente (más allá del negocio actual de los bancos).

Todos usan con pasmosa liviandad la palabra democratizar. Es una confrontación donde además de cuestiones ideológicas se juegan distintos tiempos de llegada al mercado, y mucho lobby corporativo y político.

En el último año algunos reguladores latinoamericanos dieron pasos importantes hacia la liberalización, al reconocer un papel importante y legítimo a los jugadores no bancarios. Este tema lo abordamos en Movilion en octubre del año pasado, sobre la base de un reporte de Xavier Faz del CGAP, en la nota Billeteras móviles y regulación en América Latina.

Pero poco después hubo novedades. En Banco Central de Brasil y la SBS, entidad que regula los servicios financieros en el Perú (Superintendencia de Banca y Seguros), emitieron una serie de dictámenes con el objetivo de fomentar la inclusión financiera a partir de un ecosistema más competitivo para el dinero móvil.

A fines de octubre, la SBS emitió la norma 29.985, que permite a las entidades no bancarias la emisión de dinero electrónico. Y poco después el Banco Central de Brasil presentó una guía para la puesta en marcha de los pagos móviles sobre los principios de la Ley 12.865.

En ambos mercados las nuevas normas habilitan la creación de una entidad jurídica nueva y especializada para los emisores de dinero electrónico, bajo licencia de la autoridad financiera. En Brasil, esta nueva entidad es una institución de pagos, mientras en Perú es más bien una empresa que emite dinero electrónico (EEDE, Entidades Emisoras de Dinero Electrónico).

Para resguardar los recursos de sus clientes, los concesionarios deben crear un fideicomiso por el mismo volumen de dinero que gestionan de forma electrónica (a los emisores no bancarios se les impide funcionar como intermediarios de los fondos).

Además, las licencias están sujetas a resguardos adicionales, incluido un mínimo de capital, que en ambos casos es de 800.000 dólares, y un mínimo de patrimonio neto (equity) equivalente al 2% del valor total del dinero electrónico en circulación (en Perú), y el 2% del promedio mensual de las transacciones electrónicas (Brasil).

Otra condición impuesta por estas nuevas normas en ambos mercados es la interoperabilidad. Las compañías que pretendan una licencia para operar dinero móvil deberán tener una hoja de ruta clara de cómo piensan interoperar con el ecosistema financiero más amplio y maduro.

La situación en Brasil
Desde que en Brasil se flexibilizó el rol de los operadores no bancarios, en mayo de 2013, se pusieron en marcha tres sistemas de dinero móvil: Vivo y MasterCard lanzaron Zuum, Oi lanzó un servicio de billetera móvil prepaga bautizado Oi Cartera, en conjunto con Banco de Brasil y la red brasileña de pagos electrónicos Cielo y otro servicio llamado Meu Dinheiro Claro que surgió de una asociación entre ese operador móvil y Bradesco.

Por último, TIM Brasil, la Caixa y Mastercard anunciaron recientemente que están en el tramo final de sus pruebas para un servicio de pagos móviles que estaba previsto para ser lanzado a finales del 2013, pero que debió aguardar las disposiciones del Banco Central de Brasil comentadas en la primera parte de esta nota.

El caso Perú
En Perú quienes tomaron la iniciativa fueron los bancos, a través de la Asociación de Bancos del Perú (Asbanc), que ya atravesó el proceso de selección de una plataforma tecnológica que permitirá interoperar de forma unificada un servicios de pagos móviles en ese país.

A cargo del proyecto está Miguel Arce, gerente de Desarrollo e Innovación de Nuevos Canales del Scotiabank de Perú, y presidente del Comité de Dinero Electrónico de Asbanc. “Luego de un proceso muy incesante nos hemos puesto de acuerdo y estamos apostando por una plataforma universal – le comentó Arce a Movilion-. Ya estamos en la última etapa del proceso de selección de la tecnología y ahora estamos invitando a las telcos. Este modelo se le ha llamado el modelo Perú como un caso único en el mundo de coopetition”.