Con la mayoría de los pacientes teniendo un dispositivo móvil, la salud móvil (mHealth) promete revolucionar la industria y cambiar el equilibrio de poder del médico al paciente.
Esa es la opinión de Martín Ingvar, profesor del Instituto Karolinska. “El traspaso de poder hacia el paciente llegó para quedarse”, expresó Ingvar.
Además, señaló que el 98% de los pacientes de los hospitales en Suecia tiene un smartphone, de acuerdo con un informe de Wireless Week.
La cantidad de información médica que los pacientes pueden acceder a través de su smartphone u otros dispositivos, está obligando a algunos cambios en la industria de la salud que tradicionalmente trató los síntomas y desatendió la prevención.
Ahora, los wearables suman a los datos disponibles, mediante el seguimiento de los signos vitales y nivel de actividad del paciente. “Los wearables están un paso adelante. En este momento, la mayoría no son realmente útiles, pero te prometo que de ahora en adelante tendremos un montón de cosas por venir”, expresó Ingvar.
Algunos médicos tienen dificultades para aceptar el cambio en el poder que conlleva mHealth, dado que la cantidad de información disponible, puede ser abrumadora, tanto para el paciente como para el médico.
“El problema no es conseguir la información, sino seleccionar la información que tenemos. La industria de la salud está desarrollando software rápidamente con el fin de decidir que es importante de toda esa información”, dijo.
Ingvar hace hincapié en la necesidad de normas uniformes y una gran seguridad para la construcción de la nueva infraestructura de TI de la salud. La seguridad es una necesidad ya que los pacientes van a pasar menos tiempo en un ambiente hospitalario controlado y más tiempo en el hogar a través de la monitorización de pacientes a distancia y con atención preventiva, señaló.
(Vía Fierce Mobile IT)